Sigillo celebra el poder del símbolo y la elección, transformando la joya en una declaración de identidad y un contenedor de emociones, recuerdos y fragmentos de la vida cotidiana. El anillo ovalado, en oro amarillo satinado de 9 quilates, emana una luz cálida y envolvente, mientras que un delicado toque de diamantes subraya su elegancia.